miércoles, 27 de abril de 2016

Rosas rojas para Julie

—Con este ramo de rosas rojas, te entrego toda la pasión que siento por ti.
A Julie le afecto mucho el divorcio de sus padres, y cuando fue a Mallorca, a pasar unas vacaciones con su padre y la nueva esposa de este, tenía la secreta esperanza de que, algún día, sus verdaderos padres volvieran a unirse. Por desgracia, no estaba preparada para defenderse, contra la censura del apuesto Felipe de Torres y Aquiliño, que, firmemente, le había dicho que no interfiriera en los asuntos de sus padres. Para su infortunio, se había convencido que estaba enamorada de él…, un hombre que tenía, dos candidatas para escoger esposa.

Ayer y siempre

"Ahora eres mía, Jessie. Siempre serás mía".
En alguna oportunidad, esas eran las palabras que Jessica ansiaba escuchar. El cumplimiento de todos sus sueños. ¡Qué estúpida había sido…! una ingenua escolar que creyó que Steve era "un hombre de mundo".
Ahora ya no era tan tonta. Era toda una mujer. Hermosa, inteligente, una profesional, y de las mejores. Inesperadamente había vuelto a aparecer Steve en su vida. Con fortuna, hombre poderoso, y que la deseaba. No había cambiado su cabello color miel, su tostada virilidad. Pero en sus ojos había una mirada de malicia. ¿Dónde estaba ese muchacho con los ojos alegres, que había roto su corazón? ¿Era capaz ella de evitar darle una nueva oportunidad?