viernes, 24 de julio de 2015

La novia del Italiano

Una noche de pasión incontrolada había dejado a Cassandra Wilde embarazada de Benedict Constantino. La solución del empresario italiano era casarse inmediatamente, pero Cassie deseaba casarse con un hombre que la amara. Aunque no había contado con las especiales dotes de persuasión de Benedict…
Una vez en Italia después de la boda, Cassie empezó a albergar la esperanza de que su matrimonio de conveniencia se llenara de amor y pasión. Pero cuando Benedict se metió de lleno en su trabajo, Cassie se dio cuenta de que iba a resultarle muy difícil hacer realidad sus deseos…

¿Podía un matrimonio de conveniencia convertirse en algo verdadero?

Dulce Inocencia

Seducirla sería su mayor venganza…
Ganar dinero era la gran pasión de Damon Cyrenci… hasta que conoció a la bella y dulce Abbie Newland. Seducido por sus encantos, bajó la guardia… y tuvo que pagar un precio muy alto por ello: Abbie se lo llevó todo y mantuvo en secreto el hecho de que estaba embarazada de su hijo.
Pero Damon no pensaba dejar que se saliera con la suya. La obligaría a someterse convirtiéndola en su esposa de conveniencia.

Como madre de su hijo, Abbie sería su posesión más preciada…

En Sicilia con amor

Desea que, cuando por fin vaya a su cama, arda de pasión y le suplique su amor… Corinne Mallory no sabe mucho de Raffaello Orsini, aparte del hecho de que es muy rico, extremadamente guapo y que es el viudo de su mejor amiga. Cuando Raffaello le ofrece casarse con ella por el bien de sus hijos, ya que aquél fue el último deseo de su fallecida esposa, Corinne rechaza su vergonzosa propuesta… hasta que su situación económica la lleva al altar junto a aquel fogoso siciliano.

Una vez en Sicilia, Raffaello deja bastante claro que no quiere que su matrimonio sea sólo de conveniencia. Y tampoco desea que Corinne esté con él por obligación. La quiere a ella, en cuerpo y alma…

Destinados a amar

Charlotte Chandler se entregó en cuerpo y alma a su guapo amante, pero sus sueños se hicieron pedazos cuando descubrió la verdad… el italiano que la había seducido era el despiadado magnate Riccardo di Napoli. Para entonces, el daño ya estaba hecho…

Riccardo no había podido perdonar a aquella inglesita y no comprendía por qué desconfiaba de él. Charlotte sabía que, en cuanto se enterara de que estaba embarazada, nada detendría a Riccardo hasta hacerse con su hijo… y con ella como esposa.